Patricio, un empleado de cincuenta y cinco años, se halla presto a la jubilación. Su libertad está próxima, y él se prepara para disfrutarla haciendo realidad sus sueños.
Sin embargo, las cosas no van a resultar tan sencillas como imagina. Perseguido por sus fantasmas, y obsesionado por mantener bajo control cuantos elementos conforman su particular universo, se ve incapacitado para afrontar con un mínimo de serenidad los diversos contratiempos que se le van presentando.
Así, tras una serie de peripecias vitales, en las que lo objetivo y lo subjetivo se mezclan de manera indiferenciada, Patricio se verá obligado a reconocer su fracaso.
