El actual modelo económico en el mundo occidental se caracteriza por un sobredimensionamiento del Estado que ha provocado déficit público, desempleo y bajas tasas de crecimiento económico.
Esta obra defiende la necesidad de recuperar las bases del libre mercado que hicieron triunfar al sistema capitalista occidental y que ahora están aplicando con éxito Corea del Sur, Taiwán, Hong Kong y Singapur, casos que se estudian pormenorizadamente en este trabajo.
Alentar al individuo a desarrollarse plenamente por sí mismo, sin olvidar a los más necesitados, favorecer el espíritu emprendedor, la tolerancia y la autonomía, fomentar la cooperación
recíproca y voluntaria sin restricciones ni privilegios y con un Estado limitado que proteja la propiedad privada y los contratos individuales son algunas de las recetas propuestas para superar la situación actual y volver a un camino de crecimiento sostenido.
