Cuando el alma o el cuerpo de los niños se desequilibra y su capacidad de relacionarse con los demás se ve amenazada, los pequeños presentan trastornos en su desarrollo emocional. Con amor y empatía, Ingrid Dykstra muestra en esta obra cómo influye el destino de las familias en el desarrollo psicológico de los niños. Con ejemplos de casos familiares reales, demuestra cómo las constelaciones familiares pueden arrojar luz sobre estos conflictos. Con consejos, ejercicios psicomotrices y terapia familiar, los niños pueden recuperar su equilibrio y toda la familia puede liberarse de actitudes negativas que vienen arrastrándose generación tras generación.
