Todo ocurre en un sencillo edificio de vecinos del madrileño barrio de Hortaleza. También sus protagonistas son gente sencilla, de esa que nos cruzamos a diario. Del mismo modo que de lejos los árboles son bosque, pero puestos en primer plano se desvelan como sujetos sublimes y heroicos, cada uno de nosotros atesora un bagaje único.
Con una escritura fluida, y una proverbial facilidad para dibujar personajes y para manejar sus sentimientos, el autor nos invita a participar en un juego de miradas de perspectivas cruzadas en el que los relatos se trenzan, otorgándose una nueva dimensión unos a otros.
Un edificio de vecinos convive con un solar poblado por gatos. En los dos habitan los verdaderos protagonistas de esta historia: el amor, la soledad, los anhelos y la muerte. De esta y de todas las historias, porque en el fondo todas son la misma: la de nuestras peripecias durante la travesía de esta existencia inexplicable.
La novela de Tato Cabal, como sucede con la buena literatura, evita convertir la narración en un juicio. Deja que los personajes tomen su decisión, que se las arreglen con su destino. Luis García Montero
Esta historia, intimista y dura, pero contada con un fino sentido del humor y una especial ternura, resulta entrañable. Solar de gatos es una novela destinada a quedar en la memoria de los que se adentren en sus páginas. José Luis Alonso de Santos
Excelente novela en la que Tato parece descender tres o cuatro metros y escarbar en la costra del mundo para sacar sus inmundicias. Sin duda, su mejor novela. Fermín Cabal
